¿Qué programa de fidelización es el ideal para cada negocio?
Los programas de fidelización dejaron de ser una herramienta complementaria para transformarse en un eje estratégico del negocio. Su impacto va más allá de la recompra: pueden incrementar entre un 15% y un 25% los ingresos de consumidores recurrentes y mejorar significativamente la percepción de marca. Según el estudio Estrategias y programas de fidelización en Latinoamérica 2025 de EY, el 83% de los consumidores afirma que su visión sobre una marca mejora cuando participa en un programa de lealtad, mientras que el 82% reconoce que gasta más con aquellas empresas que los implementan
Dentro del universo de opciones, los programas de puntos siguen siendo los más extendidos. Basados en la acumulación y el canje, permiten a los negocios registrar patrones de consumo y generar segmentaciones precisas. Son ideales para comercios con alta frecuencia de compra y ticket medio, como supermercados o cafeterías. La información obtenida a través de este modelo es una ventaja competitiva: permite personalizar recompensas y construir estrategias basadas en datos reales, algo que los consumidores valoran cada vez más.
Los programas de sellos conservan su eficacia por su simpleza. Funcionan como una recompensa directa al hábito de compra frecuente. Su digitalización los potenció, ya que hoy pueden integrarse con bases de datos, automatizar promociones y generar reportes en tiempo real. Esta modalidad es particularmente efectiva en comercios locales o rubros de cercanía, donde la experiencia cotidiana y la inmediatez del beneficio refuerzan el vínculo con el cliente.
Los clubes de fidelización, en cambio, se orientan a la construcción de comunidad. El estudio de EY muestra que un 34% de los consumidores latinoamericanos valora el acceso a experiencias o eventos exclusivos, y un 31% prioriza la posibilidad de elegir sus propias recompensas
En este modelo, la motivación no es económica sino emocional: sentirse parte de un grupo selecto, acceder a lanzamientos o a contenidos diferenciados. Este enfoque se ajusta mejor a marcas que apuestan por una conexión de largo plazo y buscan transformar clientes en embajadores.
Los cupones digitales completan el panorama. Su eficacia está en la inmediatez: atraen nuevos compradores o reactivan a los inactivos. Al integrarse con plataformas de venta y canales digitales, permiten medir resultados de forma precisa y segmentar por comportamiento. En un entorno donde el 61% de los consumidores pertenece a más de un programa dentro de la misma categoría, la diferenciación pasa por la personalización y por la fluidez entre canales, no por la cantidad de beneficios
El futuro de la fidelización se orienta a la flexibilidad. Los consumidores buscan autonomía: poder elegir recompensas, decidir cómo recibir comunicaciones o adaptar beneficios a su estilo de vida. Para los negocios, esto implica integrar tecnología que permita capturar datos, analizarlos y traducirlos en acciones concretas. En este escenario, plataformas como Alax cumplen un rol central al ofrecer soluciones que unifican los programas de fidelización, gestionan la información de los clientes en tiempo real y permiten ejecutar estrategias omnicanal con coherencia y eficiencia en todos los puntos de contacto.
Fuente: www.gaf-franquicias.com
10 de Diciembre de 2025
